
Dicho reconocimiento según el propio Decreto (que puede leer completo pinchando aquí) trae causa de la fusión de la Hermandad de Nuestra Señora de Roca Amador con la Hermandad Sacramental en 1844, y en la posterior fusión de la Hermandad resultante de la misma con la Hermandad de María Santísima en su Soledad en 1977.
Con este Decreto por tanto recupera nuestra Hermandad el carácter que por historia le correspondía.
El retablo de Ntra. Sra. de Roca-Amador se encuentra muy próximo a la finalización de su restauración llevada a cabo en el último año y medio.

